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Formas sencillas de guardar recetas en línea y mantenerse organizado

En el mundo digital actual, encontramos recetas por todas partes: carretes de Instagram, tableros de Pinterest, blogs gastronómicos e incluso secciones de comentarios. Pero guardar y utilizar esas recetas más tarde es otro desafío. Si alguna vez te has peleado por encontrar ese plato que juraste haber marcado como favorito la semana pasada, no eres el único.

Aprender a guardar recetas en línea de forma fiable y organizada puede cambiar tu rutina culinaria. Ahorra tiempo, reduce la frustración y te ayuda a cocinar más a menudo con menos conjeturas. Tanto si eres nuevo en la cocina como si ya preparas la comida todos los domingos, a continuación te mostramos las mejores herramientas y estrategias para crear tu propia colección digital de recetas.

Por qué es importante guardar las recetas en Internet

Se preguntará: ¿por qué no volver a buscarlo más tarde? Porque los contenidos digitales se mueven rápido. Las páginas web cambian, los enlaces se rompen y las plataformas sociales no siempre facilitan la búsqueda de lo que has visto antes. Guardar recetas sobre la marcha asegura:

  • No perderás un plato que te encantaba.
  • Pasará menos tiempo buscando y más cocinando.
  • Planificar tus comidas será más fácil si tienes recetas a mano.

Disponer de un sistema de recetas centralizado y bien organizado compensa rápidamente, sobre todo cuando se carece de tiempo o de ideas.

Las mejores herramientas y métodos para guardar recetas en línea

No hay una única forma correcta de guardar recetas en línea: el mejor método depende de tus hábitos, preferencias y de la frecuencia con la que cocinas. Tanto si quieres una herramienta que haga el trabajo por ti como si prefieres un sistema manual que puedas controlar por completo, hay una solución que se adapta a ti. A continuación te ofrecemos un desglose de las formas más eficaces y prácticas de recopilar y organizar tus recetas favoritas de la web.

1. Empiece con una aplicación inteligente que lo recoja todo

Si buscas una solución que no requiera intervención alguna, lo mejor es una aplicación de recetas. Estas plataformas están diseñadas específicamente para recopilar y organizar recetas de una forma que tu navegador nunca podrá.

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Construimos ReciMe para los cocineros caseros que están cansados de las capturas de pantalla dispersas, los mensajes guardados y el caos del navegador. Con ReciMe, todas sus recetas viven en un lugar limpio y de búsqueda. Puede importar desde Instagram, Pinterest, TikTok, YouTube, o incluso subir fotos de un libro de cocina. Después lo organizamos todo automáticamente, para que puedas centrarte en lo que importa: cocinar.

Lo que nos diferencia no es solo el almacenamiento de recetas. También puedes crear listas de la compra inteligentes ordenadas por pasillo, planificar las comidas de la semana, acceder y sincronizar todo en tu teléfono, tableta u ordenador a través de nuestro Aplicación para iOS o Extensión de Chrome. Ya sea para ahorrar tiempo, reducir el desperdicio de alimentos o simplemente para decidir qué preparar esta noche, ReciMe te ayuda a estructurar tu vida en la cocina.

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2. Los marcadores pueden funcionar, si los usas bien

Los marcadores del navegador a menudo se tachan de anticuados, pero cuando se usan intencionadamente, siguen siendo una forma sólida de guardar recetas en línea. El truco está en organizarlos como un sistema de archivo, no como un cajón de sastre.
En lugar de dejar que los enlaces se acumulen, crea una carpeta específica y utiliza subcarpetas para categorías comunes como cenas, repostería o comida vegetariana. Cambia el nombre de cada favorito para poder consultarlos rápidamente sin abrir diez pestañas.
Para hacerlo aún más funcional, asegúrate de que tus marcadores se sincronizan entre dispositivos. Así, la pasta que guardaste en tu portátil durante el almuerzo también estará disponible en tu teléfono en el supermercado.

3. Capturas de pantalla y PDF: La copia de seguridad sin Internet

A veces, un sitio web cambia o desaparece por completo. En esos momentos, tener una versión guardada de tu receta se convierte en un salvavidas.
Hacer una captura de pantalla es la forma más rápida de guardar una receta en su forma actual. Ya sea en el teléfono o en el ordenador, captura la receta visible y guárdala en un álbum o carpeta claramente etiquetados. Para recetas más largas o con imágenes y formato, imprimir en PDF es una mejor opción. Así conservarás la estructura completa y podrás consultarla incluso sin conexión.
Estos métodos también son útiles para libros de cocina o recetas impresas que quieras digitalizar. Puedes escanearlas o fotografiarlas, guardarlas como archivos PDF o de imagen y almacenarlas con tus recetas en línea para acceder a ellas rápidamente.

4. Crea tu propio cuaderno digital de recetas

No todo el mundo quiere una aplicación de terceros. Si prefieres personalizarlo todo y añadir toques personales, plantéate crear un cuaderno de recetas con herramientas como Google Docs, Notion o Microsoft Word.
Considéralo tu libro de cocina digital. Puedes organizar las recetas en secciones, añadir tus propias notas, como "reduce la sal la próxima vez" o "duplica la canela", y enlazar a la fuente original. Con el tiempo, este cuaderno se convierte en un reflejo de tus preferencias culinarias, con recordatorios de lo que ha funcionado (y lo que no).
Guardarla en la nube permite acceder a ella desde cualquier dispositivo, y con las funciones de búsqueda integradas en estas herramientas, encontrar recetas resulta increíblemente rápido.

5. Utiliza el almacenamiento en la nube como biblioteca de recetas

A quienes les guste la idea del control y la flexibilidad a largo plazo, las plataformas en la nube ofrecen otra opción sólida. Puedes crear una biblioteca digital con herramientas como Google Drive o Dropbox, organizada por carpetas y archivos.
En lugar de recopilar enlaces o capturas de pantalla, guarda las recetas completas como documentos o PDF. Si optas por esta opción, la coherencia es importante. Utiliza un sistema de nomenclatura claro y simplifica las categorías para evitar tener que rebuscar en docenas de archivos más tarde.
Este método es estupendo para conservar las recetas que importan, sobre todo las familiares, las escaneadas de libros antiguos o las del blog que tienden a desaparecer con el tiempo.

6. No pase por alto el poder del correo electrónico

No es glamuroso, pero enviarse una receta por correo electrónico es una de las formas más fiables de conservarla. Ya revisas tu bandeja de entrada con regularidad, y el correo electrónico se puede buscar por palabra clave.
Acostúmbrate: cuando encuentres una receta que te guste, envíatela a ti mismo con un asunto que describa claramente el plato. A continuación, muévela a una carpeta dedicada a "Recetas" en tu bandeja de entrada. No necesitas crear un sistema desde cero: éste ya existe y funciona en todos los dispositivos.
Para los ahorradores ocasionales que no quieren instalar nada ni crear carpetas, el correo electrónico es una solución de bajo mantenimiento sorprendentemente eficaz.

7. Pinterest es ideal para los cocineros visuales

Si eres de los que cocinan primero con los ojos, Pinterest puede ser tu opción favorita. Guardar recetas aquí es algo natural: basta con anclarlas a tableros que tú mismo nombras. Es fácil organizarlas por cocina, dificultad o tema, y Pinterest guarda tanto la imagen como el enlace.
Con el tiempo, tu perfil se convierte en una galería personalizada de comidas para probar. Y una vez que hayas cocinado algo, puedes añadir notas directamente en el pin, para que te resulte más fácil recordar lo que funcionó.
Pinterest es especialmente útil cuando no te sientes inspirado. Recorrer tus tableros guardados puede darte nuevas ideas sin tener que bucear en buscadores o bases de datos de recetas.

Mantenga todo organizado (o no importará)

Guardar las recetas es sólo el primer paso. Si luego no puedes encontrarlas, no te servirán de mucho. Un sistema de organización sencillo hace que tu colección de recetas sea útil, no caótica.

Formas inteligentes de organizarse

Agrupa las recetas de forma que reflejen tu forma de cocinar:

  • Por comidadesayuno, comida, cena, postre
  • Por ocasióncomidas de semana, vacaciones, preparación de comidas
  • Por dietavegetariano, sin gluten, bajo en carbohidratos
  • Por ingredientepollo, pasta, tofu

Limítese a categorías amplias y añada detalles sólo si es necesario. Los nombres claros como "Sopa rápida de lentejas" son más fáciles de escanear que los títulos genéricos.

Mantener sin ensuciar

Revisa tu sistema de vez en cuando. Elimina lo que no te guste, actualiza las categorías a medida que cambien tus hábitos y evita utilizar demasiadas carpetas o etiquetas. La sencillez lo hace sostenible.

Las copias de seguridad importan más de lo que crees

Incluso las recetas digitales pueden desaparecer. Los sitios web cierran, las aplicaciones fallan y los dispositivos se estropean. Sin una copia de seguridad, podrías perder tus platos favoritos para siempre.

Cómo hacer copias de seguridad

  • Utilizar dos plazasaplicación + nube, o correo electrónico + impresión
  • Imprimir recetas claveConservar una copia impresa de los favoritos
  • Programar copias de seguridaduna vez al mes es suficiente
  • Prueba de accesoabrir de vez en cuando los archivos guardados para comprobar que siguen funcionando

Céntrate en conservar las recetas que realmente te gustan o que no podrás volver a encontrar. Con un sencillo hábito de copia de seguridad, tu colección se mantiene a salvo pase lo que pase.

Conclusión

Guardar recetas en línea no es sólo una comodidad: es una forma de cocinar con más confianza, menos estrés y mejor organización. Tanto si utilizas una aplicación con muchas funciones como ReciMe, como si confías en las carpetas en la nube o lo mantienes sencillo con marcadores y capturas de pantalla, la clave está en encontrar un sistema que se adapte a tu rutina. Una vez que hayas establecido un método, pasarás menos tiempo buscando y más tiempo cocinando platos que realmente te gusten. No esperes a que tu receta favorita desaparezca de Internet: empieza hoy mismo a crear tu recetario digital y haz que tu cocina trabaje para ti, no en tu contra.

Preguntas frecuentes

¿Cuál es la mejor manera de empezar a guardar recetas en Internet si nunca lo he hecho antes?

Empieza con algo sencillo. Si ya utilizas marcadores o el correo electrónico, úsalos intencionadamente para empezar a organizarte. A medida que tu colección crezca, puedes pasar a una herramienta más estructurada como ReciMe o un cuaderno digital. La clave es empezar a capturar las recetas en el momento en que las encuentras, en lugar de esperar a recordar dónde buscarlas más tarde.

¿Tengo que pagar por una herramienta de ahorro de recetas como ReciMe?

No necesariamente. ReciMe ofrece una versión gratuita con las funciones esenciales que necesitas para organizarte, como guardar recetas, planificar comidas y generar listas de la compra. Puedes actualizarla más adelante si quieres más espacio o herramientas avanzadas, pero puedes empezar a usarla gratis.

¿Cómo puedo asegurarme de no perder las recetas que he guardado de blogs o redes sociales?

La opción más segura es crear una versión de seguridad de inmediato. Guarda la receta en PDF o haz una captura de pantalla. Así, aunque el sitio web cambie o desaparezca, seguirás teniendo una copia. Es un pequeño hábito que protege tu colección a largo plazo.

¿Puedo utilizar un sistema en varios dispositivos?

Sí. La mayoría de las aplicaciones y herramientas en la nube como ReciMe, Google Drive o Dropbox se sincronizan automáticamente entre dispositivos. Eso significa que puedes encontrar tus recetas tanto si estás con el móvil en la tienda como si estás cocinando desde la tableta en la cocina.

¿Cómo evito que mi colección de recetas se sature?

Limítate a categorías amplias que reflejen tu forma de cocinar, como desayunos, cenas o platos vegetarianos. Pon nombres descriptivos a los archivos o títulos que guardes y dedica unos minutos al mes a borrar lo que no necesites. Un poco de mantenimiento hace mucho.

¿Y si quiero compartir recetas con amigos o familiares?

Puedes compartir recetas fácilmente por correo electrónico, carpetas compartidas o directamente desde aplicaciones como ReciMe. Tanto si se trata de un plato navideño como de una cena entre semana, las herramientas digitales facilitan la transmisión de recetas o la colaboración en la planificación de comidas.