Si nunca has probado la pasta rasta, estás de suerte. Este plato de inspiración jamaicana combina pasta cremosa con pollo (o gambas) sazonado con cecina, pimientos y la cantidad justa de picante. Es una de esas comidas que es lo suficientemente fácil de hacer en una noche de semana, pero lo suficientemente sabrosa como para impresionar a los invitados.
Tanto si te gusta picante o suave, con carne o sin carne, Rasta Pasta es súper flexible y las coloridas verduras le dan un aspecto tan bueno como su sabor. Veamos cómo hacerla paso a paso, sin necesidad de ingredientes extravagantes.
Ingredientes
- 450 g (1 lb) de pasta penne
- 450 g de pechuga de pollo cortada en dados
- 3 cucharadas de condimento jerk, divididas
- 2 cucharadas de aceite de oliva, divididas
- 1 cucharada de mantequilla sin sal
- 1 pimiento rojo en rodajas
- 1 pimiento verde en rodajas
- 1 pimiento amarillo en rodajas
- 3 dientes de ajo picados
- 4 cebolletas picadas
- 120-180 ml (½-¾ taza) de caldo de pollo
- 250 ml (1 taza) de nata espesa
- 100 g (1 taza) de queso parmesano rallado
- Perejil fresco picado (opcional, para decorar)

Método de cocción
1. Preparar el pollo
En un bol, mezcle la pechuga de pollo cortada en dados con 2 cucharadas de condimento jerk hasta que quede uniformemente cubierta. Déjela marinar durante al menos 15 minutos para que absorba los sabores.
2. Cocer la pasta
Poner a hervir una olla grande con agua salada (añadir 1 cucharada de sal por cada 4 litros de agua). Añada la pasta penne y cuézala hasta que esté al dente, siguiendo las instrucciones del paquete. Reserve 1 taza del agua de la pasta, escúrrala y resérvela.
3. Saltear el pollo
En una sartén grande a fuego medio, añadir 1 cucharada de aceite de oliva. Una vez caliente, añadir los trozos de pollo marinados. Saltear hasta que el pollo esté bien cocido y ligeramente dorado, unos 5-7 minutos. Retirar el pollo de la sartén y reservar.
4. Saltear las verduras
En la misma sartén, añadir la cucharada restante de aceite de oliva y 1 cucharada de mantequilla. Añadir los pimientos en rodajas y cocinar durante 3-4 minutos hasta que empiecen a ablandarse. Añada el ajo picado y las cebolletas picadas, y cocine durante 1-2 minutos más hasta que desprendan aroma.
5. Preparar la salsa
Reducir el fuego a medio-bajo. Verter 120-180 ml (½-¾ taza) de caldo de pollo y la nata espesa, removiendo para mezclar. Añadir la cucharada restante de condimento jerk. Dejar cocer a fuego lento durante 5 minutos para que espese un poco. Probar y rectificar de sal y pimienta si es necesario.
6. Combinar y terminar
Vuelva a poner el pollo cocido en la sartén y remuévalo para cubrirlo con la salsa. Añada la pasta escurrida a la sartén, mezclándolo todo. Si la salsa está demasiado espesa, añada el agua reservada para la pasta, 1-2 cucharadas cada vez, hasta conseguir la consistencia deseada. Añada el queso parmesano rallado hasta que se derrita y se incorpore bien.
7. Servir
Adorne la Rasta Pasta con perejil fresco picado si lo desea. Servir caliente y ¡a disfrutar!
Conclusión
Y así es como se prepara la pasta rasta. Es uno de esos platos que dan en el clavo: cremoso, picante, colorido y súper satisfactorio. Lo mejor es lo flexible que es. Puedes sustituir el pollo por gambas, hacerla sin carne si quieres, o subir o bajar el picante según tus gustos.
Ya sea para una cena informal entre semana o para algo un poco más especial, la pasta Rasta aporta un sabor intenso sin hacerte pasar horas en la cocina. Así que la próxima vez que te apetezca algo diferente, prueba esta receta. Puede que quieras añadirla a tu rotación habitual.