El queso es una sabrosa adición a muchos platos, pero para aquellos que vigilan su ingesta de calorías, a veces puede parecer un placer culpable. Afortunadamente, existen varias opciones de queso bajo en calorías que le permiten disfrutar del sabor y la textura del queso sin descarrilar sus objetivos de salud. Si desea reducir su consumo de calorías, perder peso o, simplemente, tomar decisiones más saludables, estos quesos bajos en calorías pueden ayudarle a mantener el rumbo de su dieta.
Incorporar queso bajo en calorías a tus comidas es una forma inteligente de mantener el sabor sin las calorías extra. Por eso, en ReciMe hemos facilitado la planificación de comidas equilibradas con herramientas inteligentes de planificación de comidas y listas de la compra personalizables. Con ReciMe, puedes importar fácilmente recetas de varias plataformas online y adaptar tu lista de la compra a tus planes de comidas. Descárgate ReciMe ahora, potencia tu nutrición, ¡y vamos a sumergirnos en las mejores opciones de queso bajo en calorías!


1. Mozzarella semidesnatada
La mozzarella semidesnatada es una gran opción para quienes desean un queso bajo en calorías pero con un sabor intenso. Es una opción popular en aperitivos como los palitos de mozzarella o como cobertura de platos como los panes planos. Su alto contenido en proteínas y calcio contribuye a la salud muscular y ósea, al tiempo que mantiene bajo control el consumo de calorías.
Este queso es una opción ideal para quienes desean mantener una dieta equilibrada, ya que aporta nutrientes esenciales sin añadir calorías innecesarias. Su versatilidad y sabor suave lo hacen fácil de incorporar a una gran variedad de comidas.
Aspectos destacados:
- Alto contenido en proteínas, que favorece la salud muscular
- Rico en calcio, beneficioso para la salud ósea
- Bajo en calorías, por lo que es adecuado para controlar el peso
- Flexible y fácil de usar en muchos platos
Para quién es mejor:
- Los que controlan su peso
- Personas que desean aumentar su ingesta de proteínas y calcio
- Cualquiera que busque un queso sabroso y bajo en calorías

2. Camembert
El Camembert es un queso blando de textura suave y sabor intenso, ligeramente más fuerte que el Brie. Es una gran elección para quienes disfrutan con los quesos cremosos pero quieren mantener a raya el consumo de calorías. Este queso combina bien con frutas como las manzanas y puede utilizarse fácilmente en aperitivos o bocadillos.
Aunque el Camembert es más graso, su textura rica y cremosa permite disfrutar de porciones más pequeñas sin excederse en calorías. Esto lo convierte en una buena opción para quienes desean disfrutar de un queso sabroso sin renunciar a una dieta equilibrada.
Aspectos destacados:
- Ofrece una textura cremosa con un sabor ligeramente más intenso que el Brie
- Aporta proteínas y calcio, favoreciendo la salud ósea y muscular
- Permite porciones más pequeñas, lo que ayuda a controlar la ingesta de calorías
- Versátil y combina bien con frutas o en diversos platos
Para quién es mejor:
- Personas que buscan un queso blando sabroso y bajo en calorías
- Los que quieran disfrutar de un rico queso con moderación
- Personas que buscan una fuente de proteínas y calcio en su dieta

3. 3. Queso suizo
El queso suizo es una gran opción para quienes buscan añadir sabor a sus comidas sin pasarse con las calorías. Es una opción equilibrada para quien desee aumentar su ingesta de proteínas y calcio. Su sabor ligeramente dulce y a nuez lo hace destacar entre otros quesos bajos en calorías. El queso suizo también tiene un contenido de sodio inferior al de muchos otros quesos, por lo que es adecuado para quienes deben controlar su consumo de sal.
La combinación de proteínas y calcio del queso suizo favorece tanto el mantenimiento muscular como la salud ósea. Su menor contenido en grasa lo convierte en una buena opción para una dieta equilibrada y rica en proteínas, ya que aporta nutrientes esenciales sin aumentar significativamente la ingesta de calorías.
Aspectos destacados:
- Alto contenido en proteínas y calcio, que favorecen la salud muscular y ósea
- Menor contenido en sodio, por lo que es adecuado para quienes vigilan su consumo de sal
- Menos grasa que muchos otros quesos
- Sabor único a frutos secos que añade profundidad a una gran variedad de platos
Para quién es mejor:
- Personas que desean aumentar su masa muscular sin perder calorías
- Los que controlan su ingesta de sodio
- Cualquiera que busque un queso sabroso y bajo en grasas

4. Requesón
El requesón es una opción popular para quienes desean controlar el apetito y mantener una dieta sana. Es una opción rica en proteínas, baja en grasas y baja en carbohidratos que ayuda a mantenerse saciado durante más tiempo. Ya sea solo o acompañado de verduras o fruta, el requesón es una comida o un tentempié saciante y saludable.
El alto contenido en proteínas del requesón favorece la saciedad, por lo que es ideal para quienes intentan perder peso o mantener la masa muscular. Por su versatilidad y su perfil nutricional, el requesón es un excelente complemento para una dieta baja en calorías y rica en proteínas.
Aspectos destacados:
- Alto contenido en proteínas, que ayudan a controlar el apetito y contribuyen al mantenimiento muscular
- Bajo en grasas y carbohidratos, por lo que es adecuado para una dieta equilibrada y consciente del peso
- Versátil y se puede utilizar en una gran variedad de platos o aperitivos
- Disponibles en variedades con o sin grasa, ideales para consumidores preocupados por su salud
Para quién es mejor:
- Personas que desean controlar el apetito y mantener la masa muscular
- Los que siguen una dieta rica en proteínas y baja en calorías
- Personas que buscan una opción de comida o tentempié versátil y rica en nutrientes

5. Queso azul
El queso azul se elabora con leche de vaca, cabra u oveja y se cura con cultivos de moho Penicillium, lo que le confiere sus características vetas azules o grises y su inconfundible sabor picante. Conocido por su fuerte aroma y su sabor intenso, el queso azul también está repleto de nutrientes, lo que lo convierte en un complemento ideal para una dieta equilibrada. Es especialmente rico en calcio, un nutriente clave para la salud ósea.
Aunque el queso azul es una opción sabrosa, también es relativamente alto en sodio, por lo que puede no ser ideal para quienes siguen una dieta baja en sodio. Sin embargo, su perfil nutricional, especialmente su contenido en calcio, lo convierte en una buena opción para quienes desean mantener la salud ósea. Puede disfrutarse en una gran variedad de platos, como hamburguesas, pizzas y ensaladas con frutas como manzanas o peras.
Aspectos destacados:
- Alto contenido en calcio, que favorece la salud ósea
- Aporta proteínas y grasas, por lo que es un complemento satisfactorio para las comidas
- Sabor fuerte y picante que complementa una amplia gama de platos
- Se recomienda consumir con moderación debido a su mayor contenido en sodio
Para quién es mejor:
- Personas que buscan un queso sabroso y rico en calcio
- Para mejorar la salud ósea
- Personas a las que les gustan los quesos fuertes y picantes y a las que no les importan los altos niveles de sodio.

6. Monterey Jack (reducido en grasa)
El queso Monterrey Jack, elaborado con leche de vaca, es conocido por su sabor suave y cremoso. La versión reducida en grasa ofrece una opción más ligera, con sólo 6 gramos de grasa por porción de 1 onza. Esto lo convierte en una opción adecuada para quienes disfrutan con el queso pero quieren reducir su consumo de grasa sin sacrificar el sabor.
El Monterey Jack es un queso versátil que puede cortarse en lonchas para galletas saladas o rallarse en platos como los macarrones con queso caseros. Con su bajo contenido en grasa y 8 gramos de proteína por porción, proporciona una opción satisfactoria para aquellos que buscan mantener sus objetivos de salud mientras disfrutan de la textura cremosa del queso.
Aspectos destacados:
- Menos grasa que el queso Monterey Jack normal
- Aporta 8 gramos de proteínas por ración, contribuyendo a la salud muscular
- Sabor suave y cremoso que puede utilizarse en una gran variedad de platos
- Adecuado para quienes buscan una opción de queso bajo en grasas
Para quién es mejor:
- Personas que buscan una opción de queso bajo en grasa
- Quienes desean aumentar su ingesta de proteínas
- Personas que buscan un queso versátil para cocinar o picar

7. Feta
El feta es un queso blando y salado originario de Grecia, que suele elaborarse con leche de oveja o de cabra. El feta de oveja tiene un sabor más picante, mientras que el de cabra es más suave. El feta suele envasarse en salmuera, lo que ayuda a conservar su frescura pero también aumenta su contenido en sodio. A pesar de su perfil salado, el feta suele tener menos calorías que muchos otros quesos.
El feta no es sólo un queso sabroso, sino que también ofrece beneficios para la salud por su contenido en ácido linoleico conjugado (CLA). El CLA está relacionado con la reducción de la grasa corporal y con cambios positivos en la composición corporal, aunque las investigaciones son limitadas y se basan sobre todo en suplementos de CLA y no en alimentos como el feta. También es una buena fuente de calcio y proteínas. El feta puede añadirse a diversos platos, desde ensaladas a huevos, o incluso utilizarse como ingrediente de salsas.
Aspectos destacados:
- Menos calorías que muchos quesos
- Aporta proteínas y calcio, contribuyendo a la salud ósea y muscular
- Contiene CLA, que puede contribuir a reducir la grasa corporal (aunque se necesita más investigación)
- Versátil, se puede desmenuzar sobre ensaladas, añadir a los huevos o utilizar en salsas.
Para quién es mejor:
- Los que buscan una opción de queso baja en calorías y sabrosa
- Personas interesadas en incorporar alimentos ricos en CLA a su dieta
- Personas a las que les gustan los quesos picantes y salados y pueden moderar su consumo de sodio

8. Ricotta
La ricotta es un queso blando y cremoso elaborado tradicionalmente con las partes acuosas sobrantes de la leche utilizada en la producción de queso, como la leche de vaca, cabra, oveja o búfala de agua italiana. A menudo considerado una versión más ligera del requesón, el ricotta ofrece un sabor suave y una textura blanda, lo que lo convierte en un ingrediente versátil en muchos platos.
El requesón no sólo es bajo en calorías, sino que también aporta proteínas de suero, que contienen todos los aminoácidos esenciales necesarios para el crecimiento y la reparación muscular. El cuerpo absorbe fácilmente el suero de leche, que se ha relacionado con diversos beneficios para la salud, como un mejor desarrollo muscular y una posible mejora de la presión arterial y el control del colesterol. Aunque las investigaciones sobre el suero de leche procedente de productos lácteos como la ricotta son limitadas, sus posibles beneficios para la salud hacen que merezca la pena añadirlo a una dieta equilibrada.
Aspectos destacados:
- Bajo en calorías y una buena fuente de proteínas
- Contiene proteína de suero de leche, que puede favorecer el crecimiento muscular y la salud del corazón
- Versátil y puede utilizarse tanto en platos salados como dulces
- Sabor suave que funciona bien en ensaladas, pasta, lasaña y salsas
Para quién es mejor:
- Los que buscan un queso bajo en calorías con beneficios proteicos
- Personas interesadas en favorecer el crecimiento muscular o controlar los niveles de colesterol
- Personas que buscan un queso versátil que pueda utilizarse en una gran variedad de platos

9. Queso Cheddar
El cheddar es un queso semiduro muy popular originario de Inglaterra, elaborado con leche de vaca y curado durante varios meses. Su sabor puede ir de suave a extra picante, según la variedad. El rico sabor y la textura firme del Cheddar lo convierten en un complemento versátil para una gran variedad de platos, desde platos de embutidos hasta platos de verduras, hamburguesas y huevos.
Además de ser una gran fuente de proteínas y calcio, el queso cheddar también es rico en vitamina K2, que desempeña un importante papel en la salud del corazón y los huesos. La vitamina K2 ayuda a prevenir la acumulación de calcio en las arterias, reduciendo el riesgo de obstrucciones y enfermedades cardiacas. Al incorporar el queso cheddar a su dieta, puede aumentar la ingesta de este importante nutriente mientras disfruta de su delicioso sabor.
Aspectos destacados:
- Rico en proteínas y calcio, favorece la salud muscular y ósea
- Contiene vitamina K2, que ayuda a prevenir la acumulación de calcio en las arterias
- Queso versátil que funciona bien en una gran variedad de platos
- Disponible en diferentes variedades, de suave a extra picante
Para quién es mejor:
- Personas que desean aumentar su ingesta de proteínas, calcio y vitamina K2
- Los que buscan un queso sabroso que pueda utilizarse en una amplia gama de comidas
- Personas que disfrutan con la variedad de niveles de picante del cheddar

10. Queso de cabra
El queso de cabra, también conocido como chevre, es un queso blando y picante elaborado con leche de cabra. Se presenta en varias formas, como queso de untar, desmenuzado o parecido al brie. Su sabor inconfundible y su textura cremosa lo convierten en un ingrediente versátil para muchos platos.
El queso de cabra no sólo es sabroso, sino también muy nutritivo. Aporta proteínas y calcio y es relativamente bajo en calorías. Además, la leche de cabra contiene más ácidos grasos de cadena media que la leche de vaca. Estas grasas son fácilmente absorbidas por el organismo y es menos probable que se almacenen en forma de grasa. El queso de cabra también suele ser más fácil de digerir para las personas que pueden tener problemas con la leche de vaca, ya que la leche de cabra tiene menos lactosa y contiene proteínas diferentes.
Aspectos destacados:
- Textura sabrosa y cremosa que funciona bien en una gran variedad de platos
- Aporta proteínas y calcio con pocas calorías
- Contiene ácidos grasos de cadena media que el organismo absorbe fácilmente
- Puede ser más fácil de digerir para las personas sensibles a la leche de vaca
Para quién es mejor:
- Personas que buscan una opción de queso sabrosa y baja en calorías
- Personas con sensibilidad a la lactosa o dificultad para digerir la leche de vaca
- Aquellos que disfrutan del sabor único del queso de cabra en ensaladas, pizzas, etc.

11. Gouda
El gouda es un queso semiduro tradicional de leche de vaca, conocido por sus característicos agujeros formados durante la fermentación. Se pone en salmuera antes de madurar, lo que realza su sabor y textura. El gouda es especialmente rico en calcio, lo que lo convierte en una buena opción para mantener unos huesos y dientes fuertes. Además, es una excelente fuente de vitamina K2, que desempeña un papel clave en la salud ósea y la regulación del calcio.
Además de su contenido en calcio y vitamina K2, el gouda contiene antioxidantes que ayudan a proteger el sistema cardiovascular, especialmente en el caso de las personas sensibles al consumo elevado de sodio. También tiene compuestos que pueden ayudar a reducir la presión arterial al relajar venas y arterias, lo que podría beneficiar a las personas sensibles a la sal. El rico perfil nutricional del gouda lo convierte en una gran opción para quienes desean reforzar la salud ósea, cardiaca y general.
Aspectos destacados:
- Rico en calcio y vitamina K2, favorece la salud ósea y dental
- Contiene antioxidantes que pueden proteger el sistema cardiovascular
- Puede ayudar a reducir la presión arterial gracias a sus compuestos inhibidores de la ECA
- Opción nutritiva con un sabor distinto y sabroso
Para quién es mejor:
- Personas que desean mejorar su salud ósea y cardiaca
- Los que buscan un queso sabroso con beneficios cardiovasculares
- Personas con sensibilidad a la sal que necesitan controlar su ingesta de sodio

12. Edam
El edam, un queso originario de los Países Bajos, se elabora con leche de vaca semidesnatada y es conocido por su sabor suave y su textura blanda. Con un contenido calórico y graso inferior al de muchos otros quesos, el edam es una gran opción para quienes desean disfrutar del queso manteniendo una dieta equilibrada. Además, aporta una cantidad impresionante de calcio, lo que favorece la salud de huesos y dientes.
Al igual que el gouda, el edam contiene compuestos que pueden ayudar a reducir la presión arterial y antioxidantes que protegen el sistema cardiovascular de los efectos de los altos niveles de sal. Su perfil nutricional, combinado con su versatilidad, lo convierte en una buena opción para quienes se centran en la salud del corazón y los huesos.
Aspectos destacados:
- Menos calorías y grasa que muchos quesos
- Rico en calcio, que fortalece los huesos y los dientes
- Contiene compuestos que pueden ayudar a reducir la tensión arterial
- Antioxidantes que ayudan a proteger el sistema cardiovascular
Para quién es mejor:
- Personas que buscan una opción de queso con menos calorías
- Personas centradas en la salud cardiaca y ósea
- Los que buscan un queso suave que encaje bien en varios platos

13. Paneer
El paneer es un queso indio elaborado con leche entera de vaca y un ácido de frutas o verduras, como el zumo de limón. Como se elabora sin cuajo animal, es apto para lactovegetarianos. El paneer es un queso que no envejece ni se funde, tiene un sabor suave y conserva su forma al cocinarlo, por lo que es perfecto para platos como el curry y las guarniciones.
Aunque el paneer tiene un contenido relativamente alto en grasa, aporta vitaminas liposolubles como las vitaminas A y D. También tiene un contenido en sal inferior al de muchos otros quesos, lo que lo convierte en una buena opción para quienes desean controlar su ingesta de sodio. Además, consumir paneer como parte de una comida puede ayudar a reducir el riesgo de caries dental, lo que supone otro beneficio para quienes desean mantener la salud bucodental.
Aspectos destacados:
- Sabor suave y conserva su forma al cocinarlo
- Rico en vitaminas liposolubles A y D
- Contiene menos sal que muchos otros quesos
- Puede ayudar a reducir el riesgo de caries dental cuando se consume con las comidas
Para quién es mejor:
- Lactovegetarianos que buscan una opción de queso sin cuajo animal
- Personas que buscan un queso con menos sodio
- Quienes deseen añadir a su dieta una fuente de vitaminas liposolubles

14. Queso Neufchâtel
El queso Neufchâtel suele considerarse la versión con menos grasa del queso fresco. Proporciona una textura cremosa similar a la del queso de nata, pero con menos calorías y menos grasa. A diferencia del queso crema, que incluye nata añadida, el Neufchâtel tiene una composición más ligera, lo que lo convierte en una buena opción para quienes buscan reducir la ingesta de grasas sin dejar de disfrutar de una textura rica y cremosa.
El queso Neufchâtel también es ligeramente más bajo en colesterol que el queso fresco normal, por lo que ofrece una alternativa más sana sin sacrificar el sabor. Puede untarse en panecillos, mezclarse con platos de pasta o utilizarse en una gran variedad de recetas en las que se desee una textura cremosa pero con menos calorías y grasas.
Aspectos destacados:
- Menos calorías y grasas que el queso fresco
- Ligeramente más bajo en colesterol que el queso fresco normal
- Textura cremosa que funciona bien en varios platos
- Ideal para quienes desean reducir el consumo de grasas
Para quién es mejor:
- Los que buscan una alternativa al queso fresco con menos grasa
- Personas que controlan su colesterol o su consumo de calorías
- Personas que buscan un queso cremoso para untar o cocinar
Conclusión
Los quesos bajos en calorías son una forma estupenda de disfrutar de los ricos sabores y texturas del queso sin comprometer sus objetivos de salud o forma física. Si está intentando perder peso, controlar su ingesta de calorías o simplemente tomar decisiones más saludables, estos quesos pueden encajar perfectamente en una dieta equilibrada. Desde el parmesano y la mozzarella hasta el queso de cabra y la ricotta, cada uno ofrece un sabor único y beneficios nutricionales. Con un enfoque adecuado de la planificación de las comidas y la compra en el supermercado, puede hacer que estos quesos formen parte habitual de sus comidas y disfrutar de platos deliciosos manteniendo las calorías bajo control.