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Las 10 mejores recetas de panecillos para cenar en casa

Hay algo en una cesta de panecillos calientes que hace que una comida sea un poco más especial. No importa si se trata de una lujosa cena festiva, un asado dominical informal o simplemente un plato de sopa entre semana: los panecillos recién hechos en la mesa la mejoran al instante. Algunos son suaves y acolchados, otros ricos y mantecosos, y algunos son tan rápidos que puedes prepararlos incluso antes de terminar el plato principal.

En este artículo hemos reunido diez recetas destacadas que abarcan una amplia gama de estilos. Encontrarás panecillos clásicos de levadura, versiones sin amasar, opciones rápidas de dos ingredientes e incluso panecillos japoneses de leche blanda. Cada una de ellas viene acompañada de pasos claros y algunos consejos prácticos para que puedas obtener los mejores resultados en casa.

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1. Panecillos clásicos

Suaves, ligeramente dulces y dorados por encima, estos son los panecillos de toda la vida. La masa se eleva dos veces, lo que les da ese interior aireado. Si se untan con mantequilla cuando aún están calientes, quedan más tiernos.

Ingredientes:

  • 2 tazas de harina común (divididas, más harina si es necesario)
  • 2 cucharadas de azúcar
  • 1 sobre (0,25 oz) de levadura RapidRise
  • ½ cucharadita de sal
  • ½ taza de leche
  • ¼ taza de agua
  • 2 cucharadas de mantequilla (más para untar)

Cómo hacerlos:

Empieza mezclando ¾ de taza de harina con el azúcar, la levadura y la sal en un cuenco grande. Calentar la leche, el agua y la mantequilla hasta que estén templados pero no calientes, y añadirlos a la mezcla seca. Batir con una batidora durante 2 minutos, raspar el bol, añadir ¼ de taza más de harina y volver a batir durante 2 minutos. Incorporar la harina restante hasta obtener una masa blanda.

Volcar la masa sobre una superficie ligeramente enharinada y amasar hasta que esté lisa y elástica, entre 8 y 10 minutos. Déjela reposar 10 minutos tapada. Divídala en 12 trozos, forme una bola con cada uno y colóquelos en un molde redondo de 8 pulgadas engrasado. Tapar y dejar levar en un lugar cálido hasta que duplique su tamaño, unos 30 minutos. Hornear a 190°C (375°F) durante unos 20 minutos, hasta que la parte superior esté dorada. Untar con mantequilla derretida y servir calientes.

2. Panecillos fáciles

Se trata de panecillos blancos sencillos hechos con harina de pan de fuerza para darles un poco más de estructura. El proceso es sencillo: mezclar, amasar, fermentar, dar forma y hornear. Funcionan bien para las comidas de todos los días, y puedes ajustar el tamaño para panecillos de hamburguesa o panecillos para perritos calientes si es necesario.

Ingredientes:

  • 500 g de harina blanca de pan de fuerza (más harina para espolvorear)
  • 7 g de levadura de acción rápida
  • 1 cucharadita de azúcar
  • 2 cucharaditas de sal fina
  • 1 cucharadita de aceite de girasol (y más para engrasar)
  • 325 ml de agua tibia

Cómo hacerlos:

Mezclar la harina, la levadura, el azúcar, la sal y el aceite en un bol grande. Vierta el agua templada y mézclela con la mano o con una espátula hasta que se forme una masa áspera sin zonas secas. Tápela y déjela reposar durante 10 minutos.

Engrasar ligeramente la superficie de trabajo y amasar la masa durante unos 10 minutos a mano (o 5 minutos con un gancho amasador) hasta que esté más firme y elástica. Forma una bola, colócala en un bol limpio y engrasado y deja que suba durante 1 hora o hasta que doble su tamaño.

Volcar la masa sobre una superficie enharinada, darle forma de salchicha larga y cortarla en 8 trozos iguales. Forme una bola apretada con cada uno de ellos y colóquelos en una bandeja de horno enharinada, dejando espacio entre ellos. Cubrir con un paño de cocina húmedo y dejar reposar en un lugar cálido entre 40 minutos y 1 hora.

Precalentar el horno a 230°C (210°C ventilador) y espolvorear los panecillos ligeramente con harina. Hornear durante 25-30 minutos, o hasta que estén ligeramente dorados y suenen huecos al golpearlos por debajo. Dejar enfriar sobre una rejilla antes de servir.

3. Panecillos blandos sin amasar

Estos panecillos se saltan totalmente el amasado, la masa se mezcla en un bol con una cuchara y se deja levar. La textura se mantiene suave y esponjosa por dentro, con la parte superior dorada tras el horneado. Como la masa es más húmeda que la de pan amasado, se le da forma con el método de juntar y voltear para conseguir un acabado liso.

Ingredientes:

  • 1 cucharada de levadura seca
  • ¼ taza de azúcar
  • ½ taza de agua tibia
  • 4 tazas de harina de pan (más harina para espolvorear)
  • 1½ cucharadita de sal
  • 1 taza de leche tibia
  • 50 g de mantequilla derretida (enfriada)
  • 2 huevos batidos
  • 1 cucharada de mantequilla derretida (para untar)

Cómo hacerlos:

Para empezar, añade la levadura y 2 cucharaditas de azúcar a un cuenco y, a continuación, vierte el agua templada. Déjala reposar 5 minutos hasta que esté espumosa. En un bol grande, mezcla la harina, el azúcar restante y la sal. Haga un hueco en el centro y añada la leche, la mantequilla derretida, los huevos y la mezcla de levadura. Remover con una cuchara de madera hasta formar una masa espesa y pegajosa, más parecida a la masa de magdalenas que a la masa de pan tradicional.

Cúbrala con una toalla húmeda y déjela levar en un lugar cálido hasta que casi haya triplicado su volumen, entre 1½ y 2 horas. Golpear la masa para que suelte las burbujas de aire, espolvorear una superficie con harina y raspar la masa sobre ella. Forme un tronco, córtelo en 12 trozos iguales y forme una bola con cada uno presionando hacia abajo, juntando los bordes y dándole la vuelta con la parte lisa hacia arriba. Colóquelas en una bandeja de horno forrada.

Cubrir con film transparente untado con aceite y dejar levar de nuevo hasta que se hinchen, unos 30-45 minutos. Precalentar el horno a 200°C (180°C ventilador) y hornear durante 15-18 minutos, o hasta que estén dorados y suenen huecos al golpearlos. Untar con mantequilla derretida y dejar enfriar un poco antes de servir.

4. Panecillos rápidos de 2 ingredientes

Estos panecillos sólo llevan harina y yogur, sin levadura, y se hacen rápidamente. La masa es ligeramente pegajosa, por lo que si se maneja con las manos ligeramente mojadas resulta más fácil darle forma. El baño de huevo es opcional, pero le da a la parte superior un bonito acabado dorado.

Ingredientes:

  • 2 tazas de harina blanca*.
  • 1¾ tazas más 2 cucharadas de yogur griego
  • 1 huevo ligeramente batido (opcional, para pincelar)

*Si no tiene harina de repostería, mezcle 2 tazas de harina común con 3 cucharaditas de levadura en polvo y ½ cucharadita de sal.

Cómo hacerlos:

Precalentar el horno a 175°C (350°F) y forrar una bandeja para hornear con papel pergamino. En un bol grande, mezclar la harina y el yogur. Mezclar con una espátula hasta que la masa comience a unirse, luego usar las manos para terminar de formar una bola suave y pegajosa. Si está demasiado húmeda, añada más harina, una cucharada cada vez.

Forme un disco grueso con la masa y córtela en 9 trozos iguales. Forme una bola con cada trozo y colóquelos en la bandeja para hornear preparada, dejando espacio entre ellos. Pincelar con el huevo batido si se utiliza.

Hornear durante unos 25 minutos, o hasta que la parte superior esté dorada. Dejar enfriar un poco antes de servir.

5. Panecillos

Son panecillos suaves y mantecosos hechos con una masa de levadura que se eleva dos veces. La fase de moldeado se centra en crear tensión en la superficie para que queden redondos y uniformemente dorados. Se hornean muy juntos en una fuente para que los lados queden blandos.

Ingredientes:

  • 1 taza de leche entera caliente (unos 110°F)
  • 1 sobre (7 g) de levadura instantánea
  • 3½ tazas de harina común, divididas
  • 5 cucharadas de mantequilla sin sal, ablandada
  • 3 cucharadas de azúcar granulado
  • 1 huevo grande, a temperatura ambiente
  • 1 cucharadita de sal
  • 2 cucharadas de mantequilla derretida para untar

Cómo hacerlos:

En un bol de batidora, mezclar la leche caliente y la levadura. Añada 1½ tazas de harina junto con la mantequilla blanda, el azúcar, el huevo y la sal. Mezcle con el accesorio de pala a velocidad media-baja hasta que se integren, luego cambie al gancho amasador. Añadir 1¾ tazas más de harina y mezclar hasta que la masa empiece a despegarse del bol. Si aún está demasiado húmeda, añada hasta ¼ de taza más de harina, cucharada a cucharada.

Seguir mezclando durante unos 2 minutos hasta obtener una masa homogénea. Pásela a un bol ligeramente engrasado, cúbrala con film transparente y déjela levar en un lugar cálido hasta que duplique su tamaño, entre 45 y 60 minutos. Estirar la masa y dividirla en 15 partes iguales. Pellizque los bordes de cada uno de ellos, déles la vuelta con la parte lisa hacia arriba y enróllelos bajo la palma de la mano formando un círculo apretado. Colóquelos en una fuente de horno engrasada de 9×13 pulgadas.

Cubrir y dejar levar de nuevo hasta que se hinche, de 30 a 45 minutos. Precalentar el horno a 350°F durante este tiempo. Hornear durante unos 20 minutos, hasta que la parte superior esté bien dorada. Untar con mantequilla derretida y servir calientes o frías.

6. Panecillos blancos blandos

Estos panecillos se elaboran con harina de uso general para conseguir un interior ligero y esponjoso y una corteza dorada. La masa tiene un toque dulce gracias al azúcar y rico gracias a la mantequilla, lo que los hace lo suficientemente versátiles como para acompañar cualquier comida. Se hornean juntos en una sartén para que los bordes queden blandos y la parte superior se dore.

Ingredientes:

  • 1 taza de leche entera caliente (unos 110°F)
  • 2 y ¼ cucharaditas de levadura seca activa
  • 2 cucharadas de azúcar granulado
  • 3 cucharadas de mantequilla sin sal, ablandada a temperatura ambiente
  • 1 huevo grande, a temperatura ambiente
  • 3 tazas de harina común, más la cantidad necesaria
  • 1 cucharadita de sal
  • Mantequilla derretida adicional para untar la parte superior

Cómo hacerlos:

En un bol grande o en el bol de una batidora de pie, mezcle la leche templada, la levadura y el azúcar. Dejar reposar de 5 a 10 minutos hasta que esté espumosa. Añada la mantequilla ablandada, el huevo, 2 tazas de harina y la sal. Mezclar bien y añadir poco a poco la taza de harina restante hasta obtener una masa blanda.

Amasar la masa durante unos 8-10 minutos a mano o con un gancho amasador hasta que esté suave y elástica. Colóquela en un bol engrasado, tápela y déjela levar en un lugar cálido hasta que duplique su tamaño, unas 1-2 horas. Estirar la masa y dividirla en 12 trozos iguales. Forme una bola con cada trozo y colóquelos en un molde engrasado de 9×13 pulgadas.

Tapar y dejar levar de nuevo durante 1 hora o hasta que se hinchen. Precalentar el horno a 190°C y hornear durante 20-25 minutos, o hasta que la parte superior esté dorada. Untar con mantequilla derretida justo después de hornear y servir calientes.

7. Panecillos de la Casa del León

Estos panecillos son ligeros, mantecosos y tienen forma de espiral que se desmolda fácilmente. Son ligeramente dulces y tienen una miga tierna, lo que los convierte en una opción popular para ocasiones especiales. El método de moldeado les da su característico aspecto en capas.

Ingredientes:

  • 2 tazas de agua caliente (unos 110°F)
  • 2 cucharadas de leche en polvo
  • 2 cucharadas de azúcar granulado
  • 2 cucharadas de mantequilla sin sal, ablandada
  • 2 cucharaditas de sal
  • 4-5 tazas de harina común
  • 2 cucharadas de levadura instantánea
  • Mantequilla derretida adicional para untar

Cómo hacerlos:

En un bol de batidora, mezclar el agua caliente, la leche en polvo, el azúcar, la mantequilla, la sal y 2 tazas de harina. Mezclar hasta obtener una masa homogénea. Añadir la levadura y 2 tazas más de harina, y seguir mezclando hasta que se forme una masa blanda. Añadir el resto de la harina según sea necesario hasta que la masa esté ligeramente pegajosa pero manejable.

Amasar durante unos 5 minutos y transferir la masa a un cuenco engrasado. Cúbrala y déjela subir hasta que doble su tamaño, aproximadamente 1-1½ horas. Estire la masa y extiéndala hasta formar un rectángulo grande de unos ¼ de pulgada de grosor. Úntelo con mantequilla derretida y córtelo en tiras de unos 5 cm de ancho. Enrolle cada tira de un extremo corto al otro para crear una forma de espiral.

Colocar los panecillos en una bandeja de horno engrasada dejando espacio entre ellos. Cubrir y dejar levar de nuevo hasta que se hinchen, unos 30-45 minutos. Precalentar el horno a 190°C (375°F) y hornear durante 15-18 minutos, hasta que estén dorados. Untar con más mantequilla derretida mientras estén calientes.

8. Rollos de la Casa Parker

Estos panecillos son ricos y mantecosos, con un interior suave y esponjoso y una característica forma plegada. Quedan dorados por fuera y tiernos por dentro. El paso de plegado les da un aspecto en capas y hace que sean fáciles de separar.

Ingredientes:

  • 1 taza de leche entera
  • ½ taza de mantequilla sin sal, más un poco para untar
  • ¼ taza de azúcar
  • 1 sobre (7 g) de levadura seca activa
  • ½ taza de agua tibia (unos 110°F)
  • 1 huevo grande
  • 1½ cucharadita de sal
  • 4½ tazas de harina común, más harina para espolvorear

Cómo hacerlos:

En un cazo pequeño, calentar la leche y la mantequilla a fuego medio hasta que se derrita la mantequilla. Añadir el azúcar y dejar enfriar la mezcla hasta que esté tibia. En un bol grande, mezclar la levadura con el agua templada y dejar reposar 5 minutos hasta que espume. Incorporar la mezcla de leche fría, el huevo y la sal. Añadir 3 tazas de harina y mezclar hasta obtener una masa homogénea; a continuación, añadir poco a poco el resto de la harina hasta obtener una masa blanda.

Amasar la masa en una superficie ligeramente enharinada durante unos 8-10 minutos hasta que esté suave y elástica. Colóquela en un bol engrasado, tápela y déjela levar hasta que duplique su volumen, aproximadamente 1-1½ horas. Estirar la masa y extenderla hasta formar un rectángulo de unos 2 cm de grosor. Cortar en rodajas con un cortador de galletas. Unte cada círculo con mantequilla derretida, dóblelo por la mitad y presiónelo ligeramente para sellarlo.

Colocar los panecillos ligeramente separados en una bandeja de horno engrasada. Cubrir y dejar levar de nuevo hasta que se hinchen, 30-40 minutos. Precalentar el horno a 190°C (375°F) y hornear durante 15-18 minutos hasta que estén dorados. Untar con más mantequilla en cuanto salgan del horno.

9. Panecillos de leche japoneses

Estos panecillos son increíblemente suaves y esponjosos gracias a un sencillo fermento tangzhong hecho con harina y agua. Tienen un sabor ligeramente dulce y una textura blanda que se mantiene fresca durante más tiempo que la mayoría de los panecillos. Se hornean en un molde individual, formando una hogaza dorada y fácil de separar.

Ingredientes:

Tangzhong:

  • 3 cucharadas de harina de pan
  • ½ taza de agua

Masa:

  • 2½ tazas de harina de pan
  • 3 cucharadas de azúcar
  • 1 cucharadita de sal
  • 2 cucharaditas de levadura instantánea
  • 1 huevo grande
  • ½ taza de leche tibia
  • ¼ taza de nata espesa
  • 3 cucharadas de mantequilla sin sal, ablandada

Cómo hacerlos:

Empezar haciendo el tangzhong. En un cazo pequeño, bata la harina y el agua hasta obtener una mezcla homogénea. Poner a fuego medio y cocer, sin dejar de remover, hasta que espese. Retirar del fuego y dejar enfriar.

En un bol de batidora, mezclar la harina de pan, el azúcar, la sal y la levadura. Añada el tangzhong enfriado, el huevo, la leche y la nata. Mezclar a velocidad baja hasta que la masa empiece a unirse, añadir entonces la mantequilla ablandada y seguir amasando durante 10-15 minutos hasta que esté suave y elástica. Pasar a un cuenco engrasado, tapar y dejar levar hasta que duplique su volumen, aproximadamente 1 hora.

Estirar la masa y dividirla en 8 trozos iguales. Forme una bola con cada trozo y colóquelos en un molde engrasado de 9×13 pulgadas. Tapar y dejar leudar de nuevo de 45 minutos a 1 hora. Precalentar el horno a 175°C (350°F) y hornear durante 20-25 minutos hasta que se doren. Untar con mantequilla derretida mientras estén calientes.

10. Panecillos integrales

Estos panecillos están hechos con una mezcla de harina integral y harina para todo uso, lo que les confiere un sabor a frutos secos equilibrado y una textura ligera. Un toque de miel añade dulzor, mientras que la mantequilla los mantiene suaves. Son lo bastante sustanciosos para acompañar sopas o guisos, pero lo bastante ligeros para las cenas de todos los días.

Ingredientes:

  • 1 taza de leche caliente (unos 110°F)
  • 2¼ cucharaditas de levadura seca activa
  • 3 cucharadas de miel
  • 3 cucharadas de mantequilla sin sal, derretida
  • 1 huevo grande
  • 1½ cucharadita de sal
  • 1½ tazas de harina integral
  • 2 tazas de harina común, más la cantidad necesaria

Cómo hacerlos:

En un bol grande, mezcla la leche templada, la levadura y la miel. Dejar reposar de 5 a 10 minutos hasta que esté espumosa. Añada la mantequilla derretida, el huevo, la sal, la harina integral y 1 taza de harina para todo uso. Mezclar hasta obtener una masa homogénea y, a continuación, añadir poco a poco el resto de la harina hasta obtener una masa suave.

Amasar en una superficie ligeramente enharinada durante 8-10 minutos, o utilizar una batidora de pie con un gancho de amasar durante unos 6 minutos, hasta que la masa esté suave y elástica. Colóquela en un bol engrasado, tápela y déjela levar hasta que duplique su tamaño, aproximadamente 1 hora. Estirar la masa y dividirla en 12 partes iguales. Forme una bola con cada una y colóquelas en una fuente de horno engrasada de 9×13 pulgadas.

Tapar y dejar levar de nuevo hasta que se hinchen, unos 45 minutos. Precalentar el horno a 190°C (375°F) y hornear durante 20-25 minutos, hasta que se doren. Untar con mantequilla derretida y servir caliente.

Cómo conseguir panecillos suaves y esponjosos en todo momento

Incluso un simple panecillo puede pasar de bueno a increíble con unos pequeños retoques. Si quieres conseguir esa textura de panadería en casa, estos consejos te ayudarán a lograrlo.

  • Utilice la harina adecuada para la textura que desee: La harina panificable da un poco más de textura, mientras que la harina común mantiene el producto suave y ligero.
  • Medir la harina correctamente: Vierta la harina con una cuchara en el vaso medidor y, a continuación, nivélela. Demasiada harina es la forma más rápida de acabar con panecillos densos.
  • Vigile la temperatura de la masa y los tiempos de fermentación: A la levadura le gusta el calor, pero no el calor. Busque un lugar templado (no caliente) para dejarla fermentar.
  • No hornear en exceso: Empiece a comprobarlo unos minutos antes. Los panecillos deben estar ligeramente dorados y sonar huecos al golpearlos en el fondo.
  • Untar con mantequilla: Mantiene la parte superior suave, añade sabor y hace que tengan tan buen aspecto como sabor.

Guía de resolución de problemas

Las cosas no siempre salen a la perfección en la cocina, pero la mayoría de los percances con los rollos son fáciles de solucionar una vez que se conoce la causa.

  • Los rollos son densos: Puede que la levadura esté caducada o que la masa no haya fermentado lo suficiente. Dale más tiempo en un lugar cálido.
  • Los rollos están secos: Esto suele significar que hay demasiada harina o que se ha horneado unos minutos de más. La próxima vez, mide con cuidado y pon un cronómetro.
  • Los panecillos no se doraron: Puede que el horno esté funcionando a una temperatura inferior a la programada o que te hayas saltado un lavado de huevos. Prueba a comprobar el horno con un termómetro.

Reflexiones finales

Los panecillos no son complicados, pero tienen esa capacidad mágica de hacer que cualquier comida resulte más cálida y acogedora. Cuando pruebes unas cuantas recetas diferentes, descubrirás cuál es tu favorita. Quizá te gusten los más ricos y mantecosos, o quizá prefieras los panecillos rápidos sin levadura para cuando no tienes mucho tiempo. En cualquier caso, no hay nada mejor que sacar una bandeja de panecillos recién hechos del horno y ver cómo desaparecen en cuestión de minutos.

Preguntas frecuentes

¿Puedo preparar los panecillos con antelación?

Sí, puede darle forma a la masa, taparla bien y guardarla en el frigorífico hasta 24 horas antes de hornearla. Sólo tiene que dejar que los panecillos alcancen la temperatura ambiente y suban completamente antes de meterlos en el horno.

¿Cuál es la mejor harina para los panecillos?

Depende de la textura que busques. La harina panificable les dará un poco más de textura, mientras que la harina común los mantendrá suaves y esponjosos. A algunas personas les gusta mezclar las dos harinas para conseguir un equilibrio.

¿Por qué no suben bien mis panecillos?

La levadura vieja suele ser la culpable, pero una masa demasiado fría también puede ralentizar el proceso. Asegúrate de que el líquido esté templado (no caliente) y deja reposar la masa el tiempo suficiente en un lugar cálido para que doble su tamaño.

¿Puedo congelar los panecillos?

Perfectamente. Los panecillos horneados pueden conservarse frescos en el frigorífico hasta 3 días, o pueden congelarse (sin envolver) durante aproximadamente un mes. Déjalos enfriar completamente y envuélvelos bien. Vuelva a calentarlos en el horno durante unos minutos para que vuelvan a estar blandos.

¿Necesito una batidora para hacer estas recetas?

En absoluto. La batidora facilita el amasado, pero también se puede hacer a mano, sólo que lleva un poco más de tiempo y esfuerzo. La clave es amasar hasta que la masa esté suave y elástica.

¿Cómo puedo mantener los panecillos blandos después de hornearlos?

Pincélelas con mantequilla derretida nada más salir del horno y, a continuación, cúbralas con un paño de cocina limpio mientras se enfrían. Esto atrapa un poco de vapor y los mantiene tiernos.